Observemos nuestros pensamientos, porque somos lo que pensamos, con el pensamiento creamos. En MEDITACIÓN, y también a través de la practica de la CONCIENCIA PLENA, nosotros podemos primero reconocer que clase de mente tenemos, que tipo de pensamientos generamos, para después aceptar su naturaleza, y con honestidad, humildad y sentido del humor acometer la transformación de nuestra forma de pensar, construyendo una mente estable, sin altibajos, que esté presente en el aquí y ahora, no inmersa en fantasías y proyecciones y falsas expectativas. Una mente sana y madura practica ejercicios de introspección que le enseñan a identificar cuales son sus propios pensamientos y cuales no son suyos, y que le permite contemplar la realidad desde otras perspectivas. La MEDITACION nos permitirá trabajar con nuestras emociones negativas , lo que nos dará estabilidad emocional, puesto que detrás de nuestros pensamientos surge siempre una emoción, y si nuestra mente es negativa nuestras emociones asociadas serán negativas, y afectaran negativamente nuestra vida. Aprender a manejar nuestra mente nos dará confianza y seguridad en nosotros mismos , y nos ayudará a vivir una vida estable y armoniosa.
A parte de la MEDITACION, es muy recomendable la práctica diaria de ejercicios SOFROLOGICOS (ver sofrología)