Podemos elegir cual es nuestra actitud delante de las circunstancias de la vida, y esta será , a la postre, nuestra única verdadera riqueza. Elegir es un acto de VOLUNTAD. Siempre culpando a los demás, irritados contra todo, enfadados porque las cosas no salen como queremos, llenos de tristeza y fustigación…..es solo ver y vivir en una parte de la realidad. Nosotros podemos cambiar las circunstancias, tomando consciencia y haciéndonos libres de decidir por nosotros mismos que es lo que realmente queremos. Tomar consciencia nos va a permitir tomar las riendas de nuestra vida.
«No es lo que me ocurre lo que determina mi vida, si no lo que yo decido hacer con lo que me ocurre», eso es lo realmente determinante.
Mi «alma» escoge para mí las situaciones, las personas adecuadas con las que yo debo encontrarme para que yo pueda desarrollarme y tener un proceso evolutivo como SER. A veces las situaciones son muy agradables, pero a veces son terriblemente difíciles, y suponen para nosotros un importantísimo desafío. Sí las tomamos como lecciones que llegan a nuestra vida para aprender y evolucionar, entonces encontraremos recursos en nuestro interior para afrontar esta y cualquier dificultad. Encontraremos confianza y soluciones, y nuestro conocimiento avanzará. En cambio, si creemos que somos impotentes….cortamos por completo el poder de creación y perdemos la posibilidad de utilizar lo que la vida nos trae para nuestro crecimiento personal. Para aceptar las circunstancias y empezar de nuevo necesitamos CORAJE Y VOLUNTAD , pero siempre funciona y siempre vale la pena.